Nathan Alterman
La noche de Eliahu
Llegará el abuelo como en un eterno pasado
a las casas de Israel con su cinto y su manto
vendrá a la mesa del pelotón hebreo
vestida de humo, polvo y plomo.
Tenderá una mano a su copa, como es costumbre
la compañía hará ante él silencio y en la puerta,
como una lágrima colosal de oro y de fiesta,
brillará la luna en el cielo de Pesaj.
Bendecirá la mesa de la cena acabada
bendecirá toda compañía, apostada o en marcha
bendecirá la fuerza nueva de la nación
que con la nueva fiesta renace.
En el cielo alto de la noche de guerra
la luna arderá sobre una tierra granate de vino
y el abuelo, envejecido con la vejez del pueblo,
se hallará cuidando esta noche su cuna.
Y murmurará entonces el abuelo: entre teniente y cabo
no haré diferencia, escuchad a este anciano
mas la fuerza de Israel,
bendecirá la fiesta
de sus hijos, con el pan de la pobreza.
Bendecirá la mesa de la cena caliente…