Todos los que se encuentran ahora en nuestros dos puestos, es decir en nuestro frente norte, se pueden dividir en tres clases: De corazón blando, valientes y "al medio", es decir, tienden o a los primeros o a los segundos y toman en general un lugar en el medio. Los terceros son la gran mayoría, y a la hora de solucionar alguna cuestión, ellos, con su tendencia a veces aquí y a veces allá, definen la balanza algunas veces para un lado y otras para otros; por lo que todas nuestras decisiones generales, tiene a veces un carácter casual, y algunas veces se contradicen. La clase de temerosos y blandos es la minoría. Hay entre ellos que muestran sus corazones, pero hay otros que defienden sus posturas con alegaciones de lógica e inteligencia. Y hay uno, que intenta con toda su fuerza, sobreponerse a su cobardía. Siempre, especialmente en la guardia nocturna, le parece que los árabes se acercan, se arrastran sobre la tierra, se acercan sigilosamente, pegados, hacia nosotros. Sin embargo, no solo evita las misiones peligrosas, sino que, por el contrario, las pide con frecuencia. A los valientes se los puede dividir, primero, en expertos y «verdes». Los últimos no temen al peligro, pero aún no se han encontrado en situaciones graves por lo que es difícil saber, como se comportarán en estas situaciones. Estos, la mayoría jóvenes, a los que el peligro escondido y desconocido todavía los divierte y atrae. Entre los valientes de esta clase se debe mencionar a una de las compañeras, la joven Judith, que se ríe bajos las balas y se lanza en cualquier momento oportuno afuera - contrariamente a las prohibiciones de los mayores que ella, como si fuera para bombear agua, o para alguna otra tarea. Entre nuestros experimentados de espíritu valiente hay que diferenciar entre dos clases: Héroes por naturaleza y héroes por reconocimiento. Los primeros nacieron valientes. Ellos son personas de carácter sano y fuerte, cuya fuerza de heroísmo late dentro de ellos, y les resulta extraño, el sentimiento y el miedo pobre y pequeño. No así son los últimos. Estos se obligan a sí mismos a no temer. Según su conocimiento e inteligencia se sienten ordenados a ir hacia el peligro y lo harán con valiente voluntad. Hay también entre nosotros, que los dos tipos de héroes se juntan en ellos. Y no falta la clase común de «héroes por su boca», quienes al momento de su corrección se enorgullecerán de actos de valentía pasados y futuros, y en el momento de peligro se convertirán en completamente borrosos. Pero en general, todos los valientes y "al medio" nuestros son un grupo de muchachos especiales, un grupo de compatriotas, que a la hora de la necesidad de pararán como uno, en el campo de batalla. Si hubieran visto los gogoles, los dostoyevskos y el resto de escritores rusos el grupo de jóvenes valientes y corajudos, sus tipos judíos hubieran sido representados de manera muy diferente. Dos puntos hebreos pequeños en el corazón de un mar tormentoso, un mar que amenaza de tragarlos a ellos también, en un abrir y cerrar de ojos, y solo cuatro docenas de hombres valientes se mantienen en guardia sin miedo. Cada noche, ojos valientes brillan en la oscuridad del entorno para ver si el enemigo es el enemigo, si no, allí detrás de la puerta, adentro, se escucha una risa sana, se escuchan discusiones y alegres canciones...

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Los guardianes franceses salieron a Hula hoy y regresaron a Metula. La situación aún no está clara, pero de todas maneras decidimos mañana salir a trabajar el campo. Es una lástima perder tiempo preciado para sembrar trigo. Queda claro que el trabajo será dirigido en la defensa de una cadena de guardias.