Una vez relató nuestro Rabi, R. Jaim de Sanz, una parábola. Un hombre deambuló varios días por el bosque y no sabía qué camino era el correcto. De repente vio a otra persona y fue hacia él. Se alegró mucho, pues ahora sabría, con seguridad, el camino correcto. Cuando se encontraron, le preguntó: Hermano mío, dime cuál es el camino correcto, pues deambulo ya hace varios días. Le dijo el otro: Hermano, tampoco yo lo sé, y también yo deambulo por aquí hace ya días, pero sí te diré que por el camino que fui yo, puedo decirte, que por este camino solo se deambula. Ahora, busquemos un camino nuevo.

 

Del mismo modo nosotros, esto puedo decirles, por este camino que hemos andado hasta hoy no debemos ir más, pues por este camino se yerra. Ahora, pues, busquemos un nuevo camino.