En aquellos días no había rey en Israel

Cada uno lo recto a sus ojos hacía.

 

Se reunieron todos los Ancianos de Israel

Y acudieron donde el profeta Samuel

El hombre de Dios.

Y le dijeron: «Ponnos sobre nosotros

Un rey que nos imparta justicia,

Así seremos como todos los pueblos».

 

Les dijo: «Será el juicio del rey

Quien reine sobre vosotros:

 

Vuestros hijos embridará a sus carruajes

Para salir a sus guerras,

Vuestros viñedos gravará con diezmos,

Pero nada retribuirá de sí.

Impondrá impuestos y gravámenes

Para construirse palacios,

Para que él y sus ministros

Puedan moverse en las calles

En carruajes con gran honor.

 

Y clamaréis en aquel día ante el rey…

¡Pero no les responderá!»

 

Escucharon todos los Ancianos de Israel,

Y atendieron las palabras de Shmuel

El hombre de Dios.

Y le dijeron: «Pon sobre nosotros

Un rey que nos imparta justicia,

Y seamos así como todos los pueblos».

Fue y les ungió un rey sobre ellos

Que sobre ellos reinó:

 

Sus hijos embridó a sus carruajes

Para salir a su guerra.

Su cosecha siempre gravó con diezmos,

Pero de sí jamás retribuyó.

Impuso impuestos y gravámenes

Para construirse palacios,

Para que él y sus ministros

Pudieran pasearse en las calles

Con carruajes llenos de honor.

 

Y clamaron en aquel día al rey…

¡Y él no respondió!

 

Se reunieron todos los Ancianos de Israel

Y acudieron donde el profeta Shmuel,

El hombre de Dios.

Y le dijeron: «Toma de sobre nosotros,

Y llévate a nuestro rey,

Para que volvamos a ser independientes.

Les dijo: «Sois vosotros los que habéis elegido un Estado.

¿De quién tenéis ahora quejas?»

 

Y en estos días hay Estado en Israel,

Y el Estado, lo recto a sus ojos hace.

 

 

Estimados,

…Durante la edición del libro de mis poemas para la imprenta en estos días, hallé este poema que escribí en la segunda mitad de los años '50, cuando el Estado tenía unos nueve años aproximadamente, según la propuesta de Gideon Shemer (por entonces esposo de Naomi y director del teatro satírico "Sambatión").

Este poema fue musicalizado por Frank Peleg y lo interpretaron Shimón Israeli, Arik Einstein y Rajel Attas. Lamentablemente no quedó grabación ni partitura alguna.

Quizás encuentren interés en él.

De paso, hoy recuerdo cada tanto este poema cuando recorro las calles de Tel Aviv y veo en muchos edificios el divertido grafitti de Herzl, padre de la frase "Si lo queréis…" y debajo la continuación: "¿No queréis? ¡No hace falta!"

25.2.10