Niños de "Hashomer Hatzair", a todos los javerim del ken en Varsovia, ¡por un gueto fuerte!

 

Esta vez no arderá la fogata shómrica. No saldremos esta vez a celebrar nuestra querida festividad en la naturaleza. No erigiremos un campamento escáutico, no fijaremos nuestra carpa y no demostraremos nuestra fuerza en pruebas para que todos vean. En el estrecho gueto, en la oscuridad del "barrio judío", en días de agonía y desesperación, perdición y derrota para nuestro pueblo, celebramos la festividad de la juventud y la rebelión, Lag Baomer. Encerrados dentro de la muralla, desconectados del amplio campo, diferenciados del ancho mundo por un alambrado de púas, murallas de ladrillo, guardias de hombres salvajes, condenados a la destrucción, al hambre y a la muerte… Una época de catástrofe mundial es la nuestra, y cuando queremos resumir en Lag Baomer 5701 nuestro trabajo y fijar líneas rectoras para el futuro, debemos decir: cada generación con su fogata, cada generación con su misión. Y la misión de nuestra generación es esta: mantener encendidas las sagradas chispas que se han salvado y avivarlas, cuando llegue el momento, a un fuego de rebelión, que quemará y arrancará todas las raíces del mal que anidan en el hombre y la sociedad. Nuestra misión es: encender el fuego, pero no un fuego que destruye y todo lo consume, sino el que es portador de luz para la oscuridad del gueto, Redención para aquellos que la esperan, progreso para la empresa libertadora humana. 

 

En Lag Baomer de 5701, hagamos un balance del alma sobre nuestros logros y nuestros fracasos, y sabremos: en última instancia no definirá la fuerza grosera, armada y brutal de nuestro enemigo, sino solo nuestro coraje interno y nuestra devoción a las ideas de rebelión, que hemos cultivado y consagrado desde entonces. Y, por ende, no tendremos un comandante de fuerzas en Lag Baomer 5701, sino un balance del alma fiel al movimiento shómrico. La aspiración a la inmunidad interna del movimiento es la que ha iluminado nuestro camino durante el último año, y a su luz debemos examinar también nuestra situación actual.