Levy Ben Amitai, Degania Bet
Shabat en la Kvutzá
A la memoria de Yosef Bavasal
Madre-Shabat encendió sus velas sobre la mesa
Y un mantel refinado extendió con dedos de una noble mano
De los seis días de esfuerzo juntó a sus hijos al descanso
y al pan en familia
Luz de Shabat sobre la mesa, la sombra se esconde hacia los muros.
Luz sobre los brazos curtidos y en las arrugas del rostro la sombra.
Y la blancura de su camisa sobre los hombros
es cual manto ritual en el hogar ancestral.
La noche cálida y oscura envolvió el paisaje del valle con el Universo
Y respira el Mar de la Galilea con el murmullo de suaves olas
Canto de la noche en las campiñas
y la voz de la cigarra serrucha el baile de las mariposas.
¿Qué imagen está por verse? ¿Una reunión de pastores?
¿Un festín familiar del pueblo?
¿La majestad de la fiesta en Israel?
¿Por qué habría el corazón de latir al recordar un grupo de esenios
habitantes del Jordán desde entonces?
Están aquellos cuyos ojos quedaron pendientes de espigas de futuro
Y hay ojos que se llenaron de alegría y temblor.
Y aquélla que entristeció su alma en el misterio
y cuyas lágrimas son sanación.
La luz está sembrada sobre la mesa y se eleva y crece la luz
En cada ojo que espíes se crean las chispas
Huirán las sombras del muro
y anda la blanca mano
Si el Shabat se ennobleció
Si es Shabat, escucha el latir de los corazones
Y el silencio del habla en esta noche en el Jordán
Extiende tus palmas sobre el pan de sus mesas
Y bendice por la paz.
Bendice a los fieles, sembradores de la luz en el campo del hombre,
y que permanezca la eterna alegría en el corazón de quien ansía la hermandad.
Aún los que vengan al mundo todos vendrán sentarse como hermanos
en un pleno Gran Shabat.