Yankele Galpaz
El noveno día
Ein Guedi, 2001
Janucá, por más que sea una fiesta agradable, querida y familiar, despierta en mí algunos pensamientos heréticos.
En primer lugar, hace tiempo que el Ministerio de Salud tendría que haberla prohibido. No es que las otras fiestas judías sean especialmente dietéticas, pero Janucá supera a todas las demás.
Tanto aceite quemado. Tantos carbohidratos malos y sabrosos. El azúcar, la mermelada y las calorías nos anegan por completo. Nadie piensa seriamente en comer una sufganiá de harina integral con edulcorante de soja y mermelada de tofu. En resumen, es un fiesta muy poco saludables
Y el hecho de que el Ministerio del Medio Ambiente junto con el los bomberos no hayan emitido una orden de restricción contra esta fiesta pirómana, es una maravilla para mí. Aunque también Lag Baomer pone en peligro la integridad de los bosques y la atmósfera, pero al menos se puede apagar cualquier fogata con un "extintor scóutico", algo impensable en una mesa festiva cubierta de quince janukiot (una vez que recibimod en nuestra boda, otra que compramos en el mercado de pulgas, otra que hemos heredado de la abuela, otra hecha con corchos por nuestro niño en la guardería, una de cerámica de nuestro hijo en primer grado, otra de cerámica del hijo de tercer grado y todo tipo de velas de toda clase de colores, hechas por los niños en sus cursos de ciencia y artes). Hay que encenderlas todas. Los niños están pegados a una caja de fósforos y gotean constantemente (hay cera de velas en todos los sitios imaginables).
Cada uno es una pequeña vela, todos portamos antorchas y el fuego se eleva en todo el país.
En resumen, una fiesta nada segura.
Pero es una fiesta nacional. No se puede negar. En estos tiempos difíciles, cuando la gente de los centros comerciales reparte pequeñas banderas para mejorar el estado de ánimo nacional, y en la erección nacional (la Torre de Azrieli) hay un tatuaje de un Maguen David iluminado para elevar la moral, no hay nada como una Intifada armada de unos pocos Macabeos, que luchan en el nombre de D's y claman violencia [hamás, en hebro] (¿Hamás?) contra un ejército de ocupación odiado y poderoso que todo el tiempo canta Glykeria, Dalaras, Poliker y otros griegos para reconfortar el espíritu y traer algún tipo de esperanza.
¡Uy!
¿Nos confundimos de griegos? ¿De Jashmonaim?
El nivel de culto a la violencia en esa historia de guerra es difícil de ocultar.
Basta sólo con ver a los escolares envueltos en sábanas blancas que apuñalan a sus amigos (incluido el elefante), haciéndolos caer muertos al suelo, sin olvidar de verificar la muerte con algunas otras puñaladas. Aplausos. Un saludo al público. A las maestras. A los padres. Después, trata de explicar durante un año que los conflictos no resuelven con violencia...
En resumen, una fiesta no muy educativa.
Y todo esto aún antes de mencionar las apuestas ilegales para menores de edad, disfrazadas de juegos con el trompo, lo que me hace sospechar que toda la historia del dinero de Janucá es sólo una forma más blanquear el dinero negro, y el Ministerio de Seguridad Pública debe, debe intervenir.
Pero lo que más me inquieta es cómo el Ministerio de Justicia y la Fiscalía del Estado aún no han ordenado una investigación sobre el episodio del aceite. ¿Cómo alcanzó precisamente para ocho días? ¿Por qué no una semana?
Y en especial, ¿qué pasó exactamente el noveno día? ¿Todo acabó? ¿Cerraron el Templo?
Tengo la impresión de que según el método de "confía en mí", alguien estaba seguro de que el aceite duraría para siempre y de que no era necesario comenzar a producirlo. Y tal vez había una envase grande, pero los sacerdotes se lo llevaron a casa para la ensalada, y quedó una jarra pequeña. En resumen, siempre se puede salir de una apestosa historia de corrupción con algún milagro. Suficientes conexiones con el rabino Ovadia Yosef...
En resumen, una fiesta muy problemática. Pero nadie tiene la intención de dejar de hacer girar ni un solo trompo. Y esto en realidad demuestra que renunciaremos rápidamente a la dieta, la salud, la seguridad, la integridad, la lógica y la ley, por una sufganiá de Eli Ron ...
Ein Guedi, 2001
Categorías: Fuentes y textos, la Edad Moderna y el sionismo, reflexión, heroísmo
Palabras clave: Humor, Janucá, velas de Janucá, Macabeos